martes, 19 de mayo de 2009

Monseñor Porras


Porras advierte de nueva arremetida contra educación católica - El primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana y arzobispo del estado Mérida, Baltazar Porras rechazó el convenio colectivo que obliga al maestro a ser difusor del proyecto ideológico del presidente Chávez y consideró la actitud del gobierno como una arremetida contra la educación católica. Comentó que en Mérida las solicitudes que hay para inscribir a los hijos en los colegios católicos representarían, en estos momentos, tener el doble de las instituciones educativas. "Es una arremetida y una aceleración quizás para tapar las protestas que día a día aumentan en todas partes del país y en educación lo que están haciendo es verdaderos estragos porque son buenas las edificaciones de los colegios de la iglesia, se mantienen muy bien porque hay un cuidado permanente y no hay la desidia que tienen muchas de las edificaciones oficiales”, advirtió en Unión Radio. Comentó que en Mérida las solicitudes que hay para inscribir a los hijos en los colegios católicos representarían, en estos momentos, tener el doble de las instituciones educativas. En relación a la situación de los medios de comunicación, Porras hizo referencia a las declaraciones dadas ayer por la Defensora del Pueblo, Gabriela Ramírez, sobre el canal Globovisión. Porras sostuvo que “la Defensora del Pueblo debería cambiarse el nombre a Defensora del gobierno porque tergiversa el papel que le toca a ese cargo y no está cumpliendo con su deber”. Exhortó a los venezolanos a preguntarse qué tipo de mensajes transmiten los medios de comunicación oficiales. Por otra parte, calificó de “injerencia interna de cualquier institución” que la Asamblea Nacional haya transmitido en cadena nacional palabras de sacerdotes sancionados por Episcopado. “Los miembros de la Iglesia deben comportarse”, expresó Porras deplorando la actitud los sacerdotes, quienes a su juicio “se están plegando a un régimen”. Al mismo tiempo, reprochó las “calumnias y las infamias” que manifestaron los curas en la AN contra el cardenal Velasco y su persona. Aclaró que las agencias católicas de ayuda provenientes de EEUU y de Europa “son tan exigentes y transparentes en la rendición de fondos que se reciben que bien difícil es ponerse a querer usar esos recursos, que no son cantidades astronómicas, y que están destinados fundamentalmente a programas sociales y la formación en educación y seminario de los sacerdotes”.

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