sábado, 10 de enero de 2009

Los Sustantivos


SUSTANTIVOS INDIVIDUALES - Como ya sabemos, los sustantivos pueden clasificarse de distintas maneras: según el género (en masculinos, femeninos o neutros), según el número (en singulares o plurales), según la estructura (en comunes, propios, concretos o abstractos), según la composición (en simples o compuestos), según el origen (en primitivos, derivados, aumentativos, diminutivos, despectivos, gentilicios, patronímicos o hipocorísticos), según la contabilidad (en contables o incontables) o según la forma (en individuales o colectivos). Dejamos la clasificación según la forma para el final ya que hoy nos referiremos a los sustantivos individuales. Se trata de aquellos nombres que, en su forma singular, nombran a un solo ser o cosa. Es importante tener en cuenta lo de la forma singular, ya que los sustantivos individuales admiten el morfema del plural para designar a más de un ser o cosa. Por ejemplo: “casa” es un sustantivo individual (una casa), pero también puede convertirse en plural (“casas”, o sea, varias casas). De esta forma, los sustantivos individuales son opuestos a los sustantivos colectivos que, con una estructura singular, nombran a un conjunto de seres o cosas. Los sustantivos colectivos ya poseen el plural de forma inherente, sin necesidad de un morfema adicional: “cardumen” (conjunto de peces), “arboleda” (conjunto de árboles), “bandada” (conjunto de aves). Ejemplos de sustantivos individuales: “Reloj”, “cama”, “hombre”, “escalera”, “libro”, “pelota”, “árbol”. “El reloj no tiene batería” (sustantivos individuales: “reloj”, “batería”)“Esa cama es muy incómoda” (sustantivo individual: “cama”)“Aquel hombre es peligroso” (sustantivo individual: “hombre”)“¿Me prestas la escalera?” (sustantivo individual: “escalera”)“Compraré ese libro” (sustantivo individual: “libro”)“Mi pelota es azul” (sustantivo individual: “pelota”)“Voy a plantar un árbol en mi jardín” (sustantivos individuales: “árbol”, “jardín”). SUSTANTIVOS PROPIOS - A diferencia de otros casos, esta clase de sustantivos no resulta difícil de reconocer ya que son aquellos que nombran a personas, animales, ríos, países, instituciones o cosas específicas. En otras palabras, se puede decir que esta categoría incluye a todos esos sustantivos individuales cuya función es la de distinguir del resto a cada individuo de una misma clase, especie o género. En cambio, los sustantivos comunes son aquellos que nombran a todas las personas, animales o cosas de la misma clase. Por ejemplo, “hombre” y “mujer” son sustantivos comunes, mientras que “Nelson Mandela” y “Rigoberta Menchú” son sustantivos propios. Por su perfil individualista, este tipo de términos se aplica a un solo ser, animal, cosa o persona. Además, los sustantivos propios tienen la particularidad de que siempre su letra inicial está escrita en mayúscula. Cuando un sustantivo propio aparece escrito en minúscula, estamos ante una falta de ortografía (se escribe “Carlos” y no “carlos”, o “María” en lugar de “maría”). “Manuel”, “Cecilia”, “Buenos Aires”, “Julio Cortázar”, “Gabriela Mistral”, “Biblioteca Nacional de Argentina”, “Francia”, “Renault”, “Perú”, “La Habana”, “Ebro”, “Club Atlético Boca Juniors”, “Gabriel Batistuta”, “Mafalda” y “Mickey” son sólo algunos ejemplos que pueden contribuir en la identificación de esta clase de palabras que se conoce bajo el nombre de sustantivos propios. SUSTANTIVOS CONCRETOS - El filósofo y ensayista español José Ortega y Gasset (1883-1955) estableció una diferencia muy clara y sencilla de entender entre estos sustantivos. Los sustantivos concretos son los nombres de objetos independientes, mientras que los sustantivos abstractos necesitan algo en lo que apoyarse (son dependientes). Por ejemplo: “belleza” es un sustantivo abstracto, ya que dicha cualidad la posee alguien o algo; en cambio, “mujer” es un sustantivo concreto. s importante insistir en que los sustantivos concretos son perceptibles a los sentidos, lo que supone que incluso pueden ser intangibles. Es decir, no hace falta poder tocar algo para que eso sea un sustantivo concreto. “Voz”, “nube” y “grito” son sustantivos concretos, pese a que sean intangibles o invisibles. Por último, hay que tener en cuenta que los sustantivos abstractos, si bien no son perceptibles por los sentidos, pueden tener una manifestación concreta que sí lo sea. “Amor” es un sustantivo abstracto, pero que puede advertirse en sustantivos concretos como “caricia” o “beso”. Ejemplos de sustantivos concretos: “La silla está rota” (sustantivo concreto: “silla”)“La niña salió corriendo” (sustantivo concreto: “niña”)“Esos perros no dejan de ladrar” (sustantivo concreto: “perro”)“El teléfono está sobre la mesa” (sustantivos concretos: “teléfono”, “mesa”). SUSTANTIVOS COMPUESTOS - Existen numerosas formas de clasificar a los sustantivos. De acuerdo a su género, por ejemplo, pueden ser masculinos, femeninos o neutros. Si nos referimos a su número, los sustantivos pueden dividirse en singulares o plurales, mientras que la estructura determina la existencia de sustantivos comunes, propios, concretos y abstractos. Hoy nos centraremos en una de las categorías resultantes de la clasificación de sustantivos según su composición. En este sentido, los sustantivos pueden ser simples (formados por una sola palabra) o compuestos (formados por dos o más palabras simples). Además de la unión de palabras simples, otra forma de crear sustantivos compuestos es anteponiendo un prefijo a un lexema básico. Cabe destacar que, en el caso de las palabras compuestas en general, hay algunas que se escriben juntas y otras separadas. Las palabras compuestas que se escriben juntas, a la hora de formar el plural, sólo pluralizan la última palabra (por ejemplo, “bocacalles” y no “bocascalles”). En cambio, las palabras compuestas que, en realidad, son dos palabras, se pluralizan sólo a través de la primera (“hombres araña”). Las palabras compuestas que se escriben separadas son consideradas de esta forma (y no como dos palabras simples) ya que se pluralizan de forma particular. Los sustantivos compuestos pueden formarse por la unión de dos palabras simples de distinta clase: sustantivo+sustantivo (“mapamundi”), adjetivo+sustantivo (“mediodía”), verbo+sustantivo (“sacacorchos”), etc. Ejemplos de sustantivos compuestos: “Cascanueces”, “pelapapa”, “aguardiente”, “anteojos”, “parabrisas”, “cuentagotas”, “paraguas”, “pisapapel”, “ciempiés”, “sacapuntas”, “guardaespaldas”, “salvavidas”, “parasol”, “cortavidrios”, “portaligas”, “matafuego”. “Murió ahogado ya que no tenía salvavidas”“Una piedra rompió mi parabrisas”“Juan olvidó su paraguas y llegó empapado”“Hoy perdí mi sacapuntas en la escuela”“El doctor me dijo que necesito anteojos”“Quiso olvidar sus penas con aguardiente”“Si utilizas un pelapapa, terminarás más rápido”“Trae el sacacorchos así podemos beber el vino”“Gracias al matafuego, el incendio no fue tan grave”. SUSTANTIVOS SIMPLES - Los sustantivos pertenecen a una misma categoría gramatical. Son aquellas palabras que funcionan como núcleo del sintagma nominal y que permiten nombrar a entidades reales o imaginarias. Los sustantivos, que poseen género y número, pueden clasificarse de distintas formas. Ahora es el momento de hacer referencia a una de las clasificaciones más sencillas, que divide a los sustantivos en dos grandes grupos. Es que, según su composición morfológica, los sustantivos pueden ser simples o compuestos. Los sustantivos simples son aquellos que están formados por una sola palabra (un solo lexema). En cambio, los sustantivos compuestos están formados por dos o más palabras. Por ejemplo: “Agua” y “ardiente” son dos palabras. “Aguardiente” es una única palabra que incluye las dos mencionadas. “Aguardiente” es, por lo tanto, un sustantivo compuesto. En cambio, “agua” es un sustantivo simple y “ardiente” es un adjetivo. Tal como puede suponerse, la mayoría de los sustantivos se clasifican dentro del grupo de los sustantivos simples, mientras que los compuestos aparecen en una cantidad mucho menor. Ejemplos de sustantivos simples: “Árbol”, “burbujas”, “casa”, “diente”, “elefantes”, “fotografía”, “gato”, “lámpara”, “mesa”, “nuca”, “pájaros”, “rata”, “silla”, “tienda”, “vacas”, “zorro”. Ejemplos de uso de los sustantivos simples: “Mi padre ha plantado un árbol”“El jabón hace burbujas”“La casa está en venta”“Se me ha caído un diente”“Quiero ir al zoológico para ver a los elefantes”“Necesito una fotografía de la abuela”“Mi gato se llama Aristóteles”“María compró una lámpara nueva”“Voy a limpiar la mesa”“Un jugador rival se golpeó la nuca y se desmayó”“El canto de los pájaros no me deja dormir”“Mi madre encontró un rata en el patio”“Trae una silla más así tu amigo puede sentarse”“La tienda de enfrente ya está cerrada”“Mientras cruzábamos la provincia, vimos cientos de vacas”“Jorge logró cazar un zorro”. Fuente: Poemas del Alma.

1 comentario:

  1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar

Su Comentario