jueves, 6 de agosto de 2009

Que fastidio


Magda Mascioli G. - Estoy realmente aburrida de todos aquellos que a diario no hacen más que criticar destructivamente a nuestro país y a nosotros los venezolanos; y ciertamente no me estoy refiriendo a extranjeros sino a venezolanos. Pues sigo sosteniendo que yo SI creo en mis conciudadanos. Muchos nos consideran pendejos pero están OLVIDANDO que, si son venezolanos, entonces forman parte de lo que ofenden, y han contribuido a eso. Es decir, escupen para arriba. Eso lo que hace es probar una vez más, que no avanzamos como ciudadanos porque JAMAS nos hemos estimado, ni tenido consideracion, ni respetado. JAMÁS hemos puesto el corazón realmente en el país que tenemos la bendición de tener, y mucho menos agradecemos a Dios el país que tenemos; y ni qué decir en contribuir a mejorarlo. Es decir, no agradecemos por el simple hecho que nos creemos MERECEDORES de todo. Nunca hemos tenido que sufrir un invierno cerrado, nunca hemos tenido que sufrir sequías interminables, guerras destructoras, ni nada parecido. Tenemos TODO, DE TODO, EN TODAS PARTES DEL PAÍS y no respetamos ni agradecemos nada. Entonces ¿Como podemos esperar o exigir respeto de quienes nos han gobernado y nos gobiernan, si los primeros que nos echamos excremento encima somos nosotros mismos? Ahhhhh pero no salgan fuera de Venezuela para que veas la maravilla de ciudadanos en los que se transforman. No salgan fuera de Venezuela para que se escuchen las maravillas que hablan del sitio donde llegan y las porquerías que hablan de su propio país. No se vayan a otro país a fregar platos, pero en Venezuela no son capaces ni siquiera de no echar basura en la calle. Ni de casualidad, en otras latitudes, se atreven a infringir una norma, a echar basura en la calle, ni nada que se le parezca. Por alla si­ cumplen con todas las normas y contribuyen a mantener el orden del país donde van porque "todo funciona", OLVIDANDO que para que "todo funcione" TODOS tienen que cumplir. Luego regresan y desde que llegan a Maiquetia comienzan a incumplir: se comen la luz roja, pagan para que les consigan los documentos, pagan al fiscal para que no les ponga la multa, utilizan las influencias cuando les conviene, se paran donde no deben pararse, atraviesan por donde no deben, no cumplen con el pago de sus impuestos, etc., etc., etc. Y despues se llenan la boca diciendo que Venezuela es un país de porqueri­a, que no es como otros países y que los venezolanos somos una basura y un catapacio de pendejos, flojos de m... que solo esperan que el gobierno les regale todo porque no nos gusta trabajar. Pero bien que supieron quedarse cuidando sus trabajos en el ayer, o bien que saben quedarse cuidando sus negocios con el régimen al día de hoy, viendo los toros desde la barrera y pensando que nada les va a suceder. O simplemente ya agarraron sus maletas y se largaron. ¡Pues bien! Como venezolana les digo a los propios y a los extraños, que el que piense que Venezuela es una porqueri­a de paí­s y el que crea que los venezolanos somos idiotas, que somos un pobre pueblo muerto de hambre, flojos, aprovechados, vagabundos, que somos una porqueri­a y que no pasamos de ser un bojote de pendejos, pues que Maiquetía está allí; y si ya salió, entonces ¡que no regrese! Eso sí­, cuando los PENDEJOS terminemos de hacer lo que tenemos que hacer, que ni regresen. En Venezuela, una de las razones por la que estamos en donde estamos, es justamente por no tener SENTIDO DE PERTENENCIA DE PAÍS. Por eso no nos hace falta gente que piense que somos una porquería pero, mientras, no contribuyen en nada para que el país mejore. En Venezuela necesitamos de gente que sienta orgullo de ser venezolano, nacido o adoptado, y que CONTRIBUYA a hacer de Venezuela un mejor pai­s y que LO DEFIENDA EN ESTA HORA ACIAGA producto del DESPRECIO QUE SENTIMOS por nosotros mismos y que nos llevó por más de 50 años (incluidos los últimos 10) a permitir a cualquier abusador hacer y deshacer a su antojo ante nuestra indiferencia e incapacidad de hacernos RESPETAR. Tristemente al día de hoy debo dar razón a mi papá, italiano que se vino a Venezuela, se casó con una venezolana y murió aquí si más bien que su familia. Él decía siempre que Venezuela es un país bendito por Dios y que los únicos que no nos dábamos cuenta de eso, somos los venezolanos. Que ironía: mi mamá me enseñó a ser ciudadana... mi papá, italiano, me enseñó a querer y defender mi país. Porque mucho extranjero es MÁS VENEZOLANO que mucho imbécil que anda por ahí teniendo el presidente que se merece. Porque, definitivamente, hay mucho cretino pseudo-opositor que se merece a Chavez... y muchos chavistas que no se lo merecen.
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P.D. ¿Quiere saber cuál es la diferencia entre el pueblo hondureño y el venezolano? Que el Hondureño, en medio de su pobreza económica, tiene una gran riqueza de corazón y de amor por su país; mientras que el venezolano, en medio de todas las riquezas naturales que tenemos, poseemos un corazón absolutamente mezquino y divorciado de nuestro país.

Tenemos un país...
pero definitivamente...
¡NO ES NUESTRO, DE CORAZÓN!

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