miércoles, 15 de julio de 2009

Aclaró y oscureció


El ministro de Comercio, Eduardo Samán, anunció la semana pasada la ruta a seguir para instaurar en Venezuela el Sistema de Comercio Socialista diseñado por el Gobierno de Hugo Chávez. Desde la sede del Banco de Comercio Exterior y en compañía del empresario socialista, Miguel Pérez Abad, presidente de Fedeindustria, Samán proclamó que el objetivo es ajustar el comercio al modelo "socialista" que adelanta Chávez, partiendo "del fortalecimiento de la producción nacional" a través de cinco líneas de acción: 1) Desarrollar la producción industrial desde el comercio. 2) Controlar socialmente los medios de distribución. 3) Establecer el rol del Estado en la formación de precios. 4) Sustituir el consumismo por la satisfacción de las necesidades sociales. 5) Establecer una geopolítica de intercambio, basada en la exportación hacia mercados del sur y de los países del ALBA.De cierto modo en la ruta anunciada por Samán casi nada es nuevo. Lo que sí se le debe agradecer a Samán es haber descrito amplia y claramente que el destino que se le depara a Venezuela es el marxismo, al cual a su entender es "el único modelo que no excluye".En la primera etapa hacia este comunismo a la cubana, está planteado reformar por lo menos cinco leyes entre otros fines, para eliminar la propiedad industrial e intelectual. Con esto se quiere restringir las patentes y las marcas comerciales, las cuales no podrán ser entendidas como títulos de propiedad, sino como concesiones sujetas a revisión periódica a discreción del Gobierno.Entre otras "novedades" anunciadas por Samán, está el renovado ataque al sector comercial, al cual se le ha estado acoquinando a base de inspecciones de los diferentes entes reguladores que hoy proliferan, entre ellos, el Seniat y el Indepabis. Ahora, el cerco se estrecha con la fijación de márgenes de comercializació n (léase ganancias), como es el caso del sector automotriz. El principio comunista detrás de todo esto es el de que la "solidaridad" priva sobre la "competitividad" , según declaró Samán.Detrás de este "nuevo" sistema comercial lo que se está gestando es un excesivo proteccionismo al aplicar el modelo, probado (y fracasado) en América Latina en los años 50 y 60, donde se busca sustituir importaciones con producción nacional, en vez de producir lo que se puede exportar con ganancia. Este modelo viene a adicionarse a una política ya en marcha en Venezuela desde que se promulgó la Ley de Tierras hace nueve años, donde el Gobierno es quien dice a los tenedores de tierras qué es lo qué deben producir, así como la resolución de las guías de movilización y comercializació n de productos básicos donde se decide qué productos y en qué cantidad se consumen en cada región o localidad. Es decir, el "Nuevo Sistema de Comercio Socialista completa la cadena del control del Estado sobre toda la cadena de producción, distribución, comercializació n y consumo del venezolano, a la usanza cubana. Bien dice el clisé que todos los caminos al infierno cubano están empedrados con las buenas intenciones comunistas de autoproclamados revolucionarios de escritorio.. Disponible en inglés en: www.veneconomy. com a partir de las 4:00 p.m.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Su Comentario