La visita del espíritu de la justicia

Por: Ivan Fernandez - El Buhonero de La Resistencia - (Con todo mi corazon para mis presos politicos) - Como en la obra de Dikens, el espiritu de la Navidad, que esta vez es un espiritu de JUSTICIA, me lleva a visitar varias casas. En la primera de ellas, veo a un adolescente que lleva muletas porque le falta una pierna, que en la soledad de su habitacion, quedamente solloza. No llora por su pierna, llora por su padre a quien todos los dias evoca, que fue asesinado a manos de uniformados, que averguenzan al pais porque en lugar de cumplir con su deber, miran a otro lado mientras las hordas agreden a estudiantes. Quiero abrazar a Jose Ramon Vilas y confortarle pero no puede escucharme ni ver las lagrimas que resbalan por mis mejillas porque ese fue el trato con el espiritu de LA JUSTICIA. Mientras me alejo, contemplo los adornos que Carolina ha colocado como un esfuerzo para hacer feliz a Jose Ramon. La siguiente visita, es a un apartamento donde una joven y hermosa mujer consuela a sus hijos por la ausencia, del padre. A diferencia de los Vilas cuyo padre no volvera, la familia Simonovis, encabezada por esa gran madre y querida amiga Bony, mantiene la esperanza de que algun dia se hara JUSTICIA e Ivan, un poco mas viejo, mas delgado y mas palido porque le niegan hasta la luz del sol, saldra de las mazmorras donde lo tienen preso y volvera a su casa. Me sorprende ver que no hay adornos, que tampoco hay hallacas, ni aguinaldos. Trato de preguntar pero la voz de Bony, hace inutil mi pregunta. Ella se prepara para pasar, junto con sus hijos, otra navidad en la prision donde esta su marido desde hace mucho tiempo, conjuntamente con Vivas, Forero, el Sargento Rodriguez y varios policies cuyo delito fue cumplir con su deber. Es la triste navidad que la familia Simonovis pasa en la carcel porque unos jueces tienen que obedecer las ordenes que reciben y ellas consisten en que deben mantener preso a Ivan y a los Comisarios a como de lugar, mientras el pais atonito y muchas veces indiferente observa que a pesar de no existir indicios en su contra, permaneecen presos porque asi lo dispuso un inmoral, a pesar que miles de venezolanos le debemos la vida porque nos protegieron de unos asesinos, que estan libres, son heroes de la revolucion y gozan de los privilegios que da un poder absoluto, ejercido en forma inmoral y disoluta. El espiritu de la JUSTICIA responde con un profundo silencio mis reclamos, y raudo me lleva a otra casa. Esta vez me sorprendo porque a diferencia de las anteriores, todos rien, escuchan musica mientras destapan los regales que compraron en sus ultimos viajes. Los regales son tantos, que sus compradors no recuerdan para quienes son ni para que sirven. Son los nuevos ricos de la revolucion que viajan en primera clase o en el avion presidencial, para asistir a conciertos en el exterior. Ellos no tienen problemas con los cupos ni con las reservaciones porque son los hijos del poder. Son los nuevos revolucionarios, ministros, gobernadores, diputados y funcionarios que disfrutan del caviar, de las Humer y de los rolexs de la revolucion. Ellos, como cierto economista, heroe de la revolucion y verdugo de los petroleros, recientemente fallecido a quien por muchas rezones, menos la del respeto no nombrare, no van a Barrio Adentro para ser tratados por medicos???? cubanos para que les receten sus cucharaditas de siguaraya y sus aspirinas. No, ellos van a reputadas clinicas del imperio o del pais, para ser tratados por los mejores especialistas. He alli, una buena parte del dinero de los venezolanos que es diariamente saqueado del tesoro nacional. La otra parte, simplemente es regalada a los chulos que como evo, raul castro, cristina y el violador nico, nos visitan frecuentemente para llevarse entre sus garras el futuro de los venezolanos. Ya mi protesta es insoportable pero el espiritu de la JUSTICIA hace caso omiso y una vez mas, me lleva a otro sitio. Esta vez, un cerro de Caracas, de esos que de noche parecen enormes arbolitos pero que en el dia, nos averguenzan por su miseria. En un rancho una mujer embarazada sostiene en sus brazos a su ultimo hijo mientras le da un tetero de Koold Aid. Ella espera a sus hijos mayores, sin oficio conocido, que en sus correrias por Caracas, siempre le traen algo para paliar el hambre eterna de sus hermanitos. Del padre no sabe porque desde las primeras horas del dia, salio con una franela y una boina roja, a confrontar con palos, piedras y pistolas una marcha estudiantil que protesta contra la enmienda. A pesar de ser analfabeta, ella tiene mucho tiempo esperando por las promesas que la revolucion le hace a su marido a cambio de sus servicios. La madre triste y pensativa le explica a sus hambrientos hijos que deben esperar el regreso del padrasto y de sus hijos mayores. Ella sabe que traeran solo los mendrugos de la revolucion porque el poder no tiene nada para ellos. Ella esta pensando que para que tanta revolucion, tanto alarde, tanta violencia y tanto cuento si el pueblo siempre esta igual. Si en las callejuelas del barrio, todos los dias matan a personas para quitarles lo poco que tienen mientras los personeros del regimen tienen 60 escoltas policiales que no pueden proteger al barrio porque estan ocupados en cosas mas importantes. Ella esta pensando que luego de largo tiempo, sus hijos menores conocen la calle mientras hacen maromas con limones para recibir unas monedas, luego ascenderan en la carrera de la vida hasta que se graduen o los maten en alguna noche triste. Ella esta pensando que ni a ella ni a sus hijos ni a su pais le conviene una enmienda que formalice la concentracion del poder en una sola persona. Ella esta convencida que existen otros venezolanos, capaces y decentes que en lugar de regalar nuestros recursos, miren a su pueblo y les ayuden mediante la educacion y la cultura a ser mejores venezolanos. Ella cree firmemente que es la unica manera de salvar a sus hijos. Muy conmovido miro al espiritu de la JUSTICIA mientras su rostro se diluye, pero antes me dice que esa es la JUSTICIA que me puede dar, la que viene del pueblo que sera capaz de corregir errores y darle una leccion de moral y democracia a quienes han sido sus verdugos. Aunque Jose Manuel Vilas no regresara, igual que miles de venezolanos asesinados, muy pronto Ivan Simonovis, Forero, Vivas, el Sargento Rodriguez y muchos mas, presos por el delito de disentir, volveran a sus casas mientras sus lugares seran ocupados por los depredadores del pais, los corruptos, los asesinos y los juices banales, encabezados por cierto militarote cuya ignorancia, como a Mussolini, le hace creer que el pueblo lo ama. Entonces ese dia, todos los venezolanos de uno y otro bando, nos reuniremos para trabajar por el pais, mientras sanan las heridas que nos dejaron. Ese fue el mensaje que me dejo el espiritu de la JUSTICIA que quise compartir con todos los que sufren el oprobio y la verguenza de este regimen. !NI UN PASO ATRAS! !SOMOS PDVSA EN LA RESISTENCIA!