Por: Énder Arenas Barrios - Sociólogo - Carrizales, Carrizales, que es esa construcción que esta mañana cuando pasamos no estaba y ahora es un edificio de 240 mil metros cuadrados; Carrizales, por favor, que vaina está pasando en este país que se hacen construcciones aprovechando que yo estoy pendiente de los grandes problemas y cuando menos lo piense, ¡pum! levantan un edificio que obviamente es un monstruo capitalista que nos obliga a consumir, carajo, esto no puede ser, no, no y no, me lo tumban ya, lo expropiamos para una universidad o ¡¡carajo!!, hacemos un hospital para mandarlo para Bolivia o Cuba.Presidente, disculpe, pero este edificio es el Sambil y lo están construyendo desde hace tres años y la permisología la firmó uno de los nuestros. Quién Carrizales, quien arregló ese papeleo. Presidente, eso lo firmó "lengua mocha", Bernal.¿Qué le pasa al Presidente, Carrizales?, pregunta Diosdado, está acaso arrecho conmigo, por las pendejadas que dicen de mí? No hombre, Diosdado, eso no lo molesta a él. Y entonces?, lo veo más rencoroso y perdonavidas que nunca. Bueno, ya sabes lo que le pasa, no sé quién carajo le leyó esa frase de Marx: "Un fantasma recorre a Europa" desde que le leyeron esa vaina le dio por leer el Manifiesto comunista y recitarlo cada vez que se echa los palos. Está jodido, está jodido, Diosdado. El país siempre lo han enterrado las grandes frases, fíjate las de Bolívar, con esa retahíla de frases que todo el mundo, y especialmente él, acomodan como se le viene en ganas la frase de Uslar: "Hay que sembrar el petróleo", cómo nos ha enloquecido. Carajo, Carrizales, si te escucha el Presidente te manda para la isla Borracha. No hombre, Diosdado, eso es pura paja. Aquí, todo se hace frase, de hecho, más que hechos, el Presidente es eso: paja y más paja. Fíjate en la de Caldera. ¿Cuál frase de Caldera? Bueno, no es de él, acaso, aquella que dice: "Sólo Dios está por encima de mí". Coño, Carrizales.Pero de verdad, Carrizales, cómo lo ves. Diosdado, este hombre está asustado por lo del referendo, tiene pesadillas, grita y dice que las maletas no se la sacan de Miraflores. Eso es bueno, Carrizales. ¿Qué es bueno? ¿Que se asuste, no crees? Sí, claro, eso es una forma de tenerlo aquí, y señala el puño. Por lo demás, ya tiene cansado a todo el mundo, especialmente a mí, que tengo que calármelo con ese atiborramiento del pasado. Ya por lo menos anda tratando de esconderse de toda frase de Bolívar que lo pueda poner en evidencia. ¡Ay, Carrizales!, el año que viene es el nuestro, sólo que hay que andar con cuidado.Tú crees que con él se puede negociar. ¡Ay, Carrizales!, todo es negociable. Tú crees que él se va a exponer que revelemos que él es lo más lejos que hay del, casi seminarista que dice ser de la administración pública. No, Carrizales. Sabemos que nosotros hemos robado, pero él, aparte de nosotros, está rodeado de robagallinas.¿Qué hacemos mientras tanto? Seguimos entonando las mariqueras de siempre y cantando: "uh, ah, Chávez es mejor que na'".
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