El huevo de la serpiente

Por: Jorge Euclides Ramírez - El_huevo_de_la_serpiente, así tituló Ingmar Bergman una de sus mejores películas, en la cual examina como ante la indiferencia de la sociedad alemana se fue incubando un régimen totalitario que a la postre colocó al mundo sobre el despeñadero de las ilusiones civilizatorias. Exaltación del nacionalismo, odio hacia los ricos, organización militar de las organizaciones civiles de apoyo a las políticas oficiales, fueron parte de los ingredientes que convirtieron a gente buena y trabajadora en un inmenso ejército de ocupación que puso bajo su bota a toda Europa. Y todo fue sucediendo gradualmente, en un ambiente de resignación dentro del cual el ala dura del nazismo fue desmontando todo vestigio de institucionalidad que interfiriera con sus planes de poner en las manos de una sola persona el dominio absoluto de Alemania. Con campesinos como los nuestros, con obreros como los nuestros, con gente maravillosa, inocente y generosa como somos los venezolanos, Hitler construyo un aparato bélico implacable donde esa gente buena se transformo en engranajes de una maquinaria aniquiladora que respondía únicamente a los dictados de un hombre enajenado por sueños de grandeza. Bajo la sombra de estas reflexiones seria oportuno que los larenses y simonplanenses en particular evaluaran el peligro que se cierne a nivel regional ante el acoso que actualmente sufren Henry Falcón como Gobernador y Richard Coroba, Luis Ladino y Fermín Marín como alcaldes. Ellos están en la mira del ala dura del PSUV y la decisión es acorralarlos presupuestariamente. Otra forma de ataque es la intervención de tierras a nivel de todo Lara para obligar al Gobernador Falcón a tomar partido, o esta con el socialismo duro y apoya los rescates o por vía contraria lo acusan de capitalista y protector de los ricos. Es dentro de este esquema de tensiones internas que el doctor José Ramón Arriechi, Director de Desarrollo Económico de la Gobernación intenta poner en practica un proyecto “salvador” mediante el cual los propietarios de tierras ubicados a las orillas de ala autopista Barquisimeto Acarigua cedan gratuitamente parte de sus tierras para así negociar un acuerdo con el INTI en el cual se respete para sus propietarios el resto de sus tierras. Pero este proyecto es apenas un intento regional de Henry Falcón para detener una decisión tomada desde Caracas de ocupar todas las tierras ubicadas a los márgenes de esta autopista, quince kilómetros lineales hacia la izquierda y dos kilómetros hacia la derecha, en sentido de Cabudare hacia Acarigua. Luego van por las tierras de Quibor y El Tocuyo para caerle luego a la Veredita. Rogamos a Dios que lo escrito en esta columna sea desmentido con gran contundencia oficial. Quisiéramos ser objeto de un desmentido público, el cual seria el primero luego de cuatro décadas de ejercer el periodismo. Ojalá.