martes, 4 de enero de 2011

Carta Abierta a Las Fuerzas del Orden


Por: Diego Ruiz Cordero - @drmovil - A LOS COMPATRIOTAS SOLDADOS Y POLICIAS - La historia de nuestro amado País está llegando a un punto de quiebre. El 26 de septiembre de 2010, la mayoría de los venezolanos se pronunció en contra de los abusos de poder que de manera creciente van ahogando el Estado de Derecho en Venezuela, abriendo paso a una autocracia de corte imperial, una monarquía inspirada en latitudes extranjeras (caribeñas) geográficamente muy cercanas, pero filosóficamente muy distantes, ya que nos tratan de imponer formas de pensar que no nos son propias, nos quieren dividir, nos quieren enemistar entre nosotros, quieren nuestro miedo y nuestro sometimiento voluntario a las ideas de otro país o de una persona de ese país.
No nos son propios, porque somos hermanos venezolanos y no dos ejércitos contrarios en una guerra civil. Porque, aunque podemos tener diferencias como es de esperarse en una democracia, podemos compartir una mesa con nuestros adversarios y hacer un esfuerzo en buscar soluciones pacíficas y de inclusión para apuntar de una vez por todas en una sola dirección, que no es la de una ideología, sino la de un estado, de bienestar, de progreso, de paz y armonía, de pluralidad y respeto, de convivencia con quienes piensan diferente. Miedo no tenemos, llevamos en la sangre el espíritu de lucha de nuestros Próceres y nuestros Caciques, pero usamos las armas de la civilización actual, que son las ideas y nuestros derechos consagrados en la Constitución Nacional de nuestro país.
En los próximos días Uds. van a llegar a una situación de toma de decisiones individual – quizás grupal - que definirá el curso de la historia y de la vida de cada uno de ustedes y de todo el pueblo venezolano. Se les va a ordenar violar los derechos constitucionales de otros venezolanos. Mientras ciudadanos desarmados estén ejerciendo su derecho a la manifestación contemplado en el primer párrafo del artículo 68 de la Carta Magna, Uds. recibirán una orden de apuntar sus armas hacia los manifestantes o de utilizar sustancias tóxicas contra los mismos lo cual está expresamente prohibido en ese mismo artículo 68, en el 2do. Párrafo. Mejor utilizar esas armas para tener a raya a los secuestradores, al hampa que tiene en jaque al ciudadano común, o a los guerrilleros que puedan atentar contra la soberanía de nuestro territorio nacional.
El pueblo venezolano está decidido a retomar el hilo constitucional. Lo que viene ahora, es una serie de pacíficos procesos refrendarios previstos en el artículo 74, y que permitirán conocer la decisión de las mayorías, y dependiendo de la adhesión de Uds. - los de las armas - a la Constitución, hacer respetar dicha voluntad de las mayorías.
Por otra parte, el artículo 350 puede ser ejercido por los manifestantes, o por Uds., ya que somos venezolanos todos. La diferencia es que si la ejercen los manifestantes y Uds. no lo hacen, será derramada sangre fraterna sin ninguna justificación, sin olvidar que el obedecer órdenes no es atenuante en crímenes de violaciones de derechos humanos.
Por otro lado si Uds. ejercen el 350, además de evitar derramamientos de sangre, será la consciencia de su rol histórico del momento, la manifestación de valor y coraje de Uds. como venezolanos, los genes del Prócer y del Cacique afluyendo para unirse a los de los manifestantes, y en contra de quienes defienden a la corona real, llamados en otros tiempos ejércitos realistas.
Cuando caiga la monarquía, que ya está en su fase final, los violadores de derechos humanos serán perseguidos en todo el planeta y por el resto de sus vidas, tales como los de Pinochet o los de Hitler. A Dios gracias, Uds. aun tienen sus manos limpias, y la base moral para simplemente apegarse a la Constitución respetando los derechos de sus compatriotas. Los exhorto a reunirse entre ustedes, leer y releer nuestra Carta Magna y plantearse escenarios y estrategias para los próximos días, para eso están entrenados y confío son excelentes profesionales, que estarán a la altura que demanda este momento histórico.
Hagamos entonces historia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Su Comentario