La tragedia de PDVSA se acentúa

Por: Gustavo Coronel - Este régimen ha creado millones de limosneros.I nformación recibida desde adentro de la industria petrolera venezolana me indica que la situación de Petróleos de Venezuela tiende a agravarse. Su flujo de caja se ha debilitado mucho y ello se traduce en falta de pago oportuno a contratistas y suplidores. Cuando esto sucede, la empresa corre un altísimo riesgo de parálisis operacional. Me informan, asimismo, que la incompetencia gerencial se ha agudizado. No es lo mismo manejar una empresa con ingresos torrenciales, como los de los tres o cuatro últimos años, que manejar una empresa con recursos que escasean abruptamente. De repente PDVSA se ha dado cuenta de que arrastra un inmenso peso muerto, constituído por incapaces, corruptos, reposeros, falsos revolucionarios y sindicalistas codiciosos y ya no tiene los dólares para mantenerlos a todos felices, mucho menos para mantener la empresa produciendo, refinando y vendiendo petróleo de manera eficiente. En especial, los proyectos que son esenciales para mantener la empresa en satisfactoria capacidad productiva están en inminente peligro de no llevarse a cabo. Por ejemplo, el complejo criogénico de Occidente, en Ulé, un proyecto de $3000 millones, se encuentra virtualmente paralizado. Desde que se dió la buena pro en Diciembre 2006 a la empresa Technip, no se han adquirido los equipos necesarios para llevar a cabo el proyecto. Dice mi fuente que la razón es trágica: cambios frecuentes en las especificaciones del proyecto y falta de personal gerencial y técnico capacitado para llevarlo a cabo. Este y otros proyectos importantes de PDVSA están atrasados o ni siquiera han arrancado. La razón es la misma: falta de personal calificado a todos los niveles. La distracción de la empresa de sus actividades medulares para dedicarla a importar y vender pollo y arroz, su total anarquía financiera que la ha llevado a entregar a Chávez una buena parte de sus ingresos para que los malgaste en limosnas y sobornos por todo el hemisferio, todo ello configura un crimen del cuál son culpables Rafaél Ramírez y el pequeño grupo de incompetentes que le acompañan en la dirección de la empresa. Esta es gente que fue entrenada en el seno de una industria petrolera profesional pero que llegó al poder por asalto, decidida a renegar de todas las reglas y procedimientos meritocráticos que le habían impedido sus ascensos en el pasado. Llegaron a destruir ese sistema y allí si han mostrado talento. Se disfrazan, vergonzosamente, con una roja vestimenta, pegan ridículos griticos de Uh, Ah, el gorila no se va…. montan inmensos afiches con las efigies de los carniceros cubanos, facilitan el uso de los aviones de la empresa para transportar a parásitos como Danny Glover y Evo Morales, dan dinero y combustibles que no son de ellos sino nuestros para financiar las campañas presidenciales en Argentina, Nicaragua y El Salvador. Una actividad como esta, la cuál bordea el territorio de lo hamponil, no puede sino desembocar en la tragedia que ya estamos viendo. Esta gente debe irse.