Por: Vinicio Guerrero Méndez - vinguerrero@hotmail.com - ... elevar el monumento consagrado a nuestra reconciliación, a la tregua y al derecho común de los hombres. Bien merecía este monumento ser tallado sobre una mole de diamantes y esmaltado de jacintos y rubíes; pero construido en nuestros corazones. Simón Bolívar - La justicia tiene una gran importancia para la vida porque pone en orden nuestras relaciones con el derecho de los demás. La gran tentación y perdición del ser humano es ponerse a si mismo, como medida única de todas las cosas y colocar su propio interés de manera ególatra y egoísta, como norma suprema. El resultado ha sido y sigue siendo el sacrificio siempre injusto de otros seres. Con estas elecciones, pareciera que no se logró nada pero si logramos mucho más de lo que podíamos imaginar ya que en un gobierno totalitario lograr lo que se logró las pasadas elecciones, fue un éxito. Hasta ese día las cosas han cambiado. No busquemos triunfos apresurados. Es un lento crecimiento pero presagio de un triunfo seguro de larga duración. El éxito requiere tiempo y ese día la pequeña semilla comenzó a germinar. Empeñados en seguir engañando al pueblo, se olvidan que ese pueblo no es “pendejo” como para no entender, que diez años han sido más que suficientes para que un mandatario cumpla con su deber! y como muestra un botón para ver, que en un país cada vez mas pobre pero con tanto dinero derrochado y regalado a los amigos, no se compadece con la realidad que hoy vivimos, que si lo comparamos con las elecciones presidenciales de ayer, una sola de cinco años produjo buenos resultados, con todo y sus desaciertos limitados por el precio del petróleo, pero respetando si se quiere, sus arcas. Hace diez años comenzó un gobierno, donde los niños que para ese entonces tenían diez años hoy circundan entre dieciocho y veinte; muy violentos en su mayoría, muchos de ellos no lograron sobrevivir, ya no están con nosotros. La violencia los condujo a la tumba, fueron terrenos mal sembrados. Los que han logrado estar vivos, ha sido con un poco de suerte, ya que cada día se abarrotan más las morgues. Si, esta década se sembró con armas de odio, de violencia y de adoctrinamiento para un ideal que ya fracasó en países desarrollados, pero aún así, el gobernante persiste en tomar ese mismo veneno con la sola intención de defender la falsa y perversa doctrina de un solo hombre. ¡Cuantas familias lloran a sus hijos muertos impunemente! Producto de un país que tiene armados a los desalmados y desarmados y vigilados los cuerpos policiales haciéndoles victimas, con armas de menor potencia. Cuando se es gobernado por un hombre que no ceja en su empeño por implantar su reelección indefinida, que incomoda y desafía, no responde, no da cuentas sino que insulta y ataca, no soluciona sino que origina conflictos, no facilita sino que dificulta, no explica sino que complica, que se constituye en un Dios y reclama toda adoración. Le encanta someter violentamente, presionar y obligar. Que pretende apropiarse de toda simpatía, que todo lo quiere someter a su servicio. Que promulga Leyes mediante sus escuetas órdenes y sólo basta una observación caprichosa para que sus incondicionales y su extensa corte de aduladores, las transmitan como órdenes. Que usa y abusa de un Estado como si fuera suyo. Pasa por encima de la justicia cuando le da la gana. Refleja sus propios rasgos: desordenado y extraviado. Un déspota, además de explosivo y paranoico. Si pudiera dominar el mundo entero lo haría. Si pudiera oprimir a todos los hombres lo haría. Siente una loca e insaciable sed de protagonismo, aplausos y suma adoración. Todo el que amenaza su poder o mengua su posición, automáticamente es su enemigo. Nace en su interior la sombra negra de la enemistad y desencadena en su mente, una guerra para aplastarlo a fuerza de sembrarle lo que sea o inventar un delito incluso de querer asesinarlo (Magnicidio). Vive lleno de delirios, alucinaciones y mentiras. No puede amar a nadie porque todo su amor es para Él. Se cree libre pero en realidad es cada vez más esclavo y despreciado de todos. Es un envidioso en potencia, le molesta que alguien sea mas admirado que el. Incluso se hace víctima y siempre busca concitar en todos sus seguidores el odio al imperio, como elemento cohesionador. No le importa su país sino su miedo. No ha encontrado el camino que es El mismo.
Por Dios estamos sometidos a este hombre resentido y herido. ¡Como le ha faltado el amor y se le ha multiplicado la maldad! Sus caminos siguen llenos de ladrones. Aunque le cueste creerlo su poder esta decayendo por diferentes acontecimientos siendo el principal problema, su lamentable verborrea para ofender y humillar. Poco a poco se ha ido desgastando por las derrotas, ya se le nota una asentada vesania. No obstante, aun cree que si no consigue el triunfo por el voto, entonces tendrá que ser bajo las armas. En suma, es un mal perdedor. Todo lo ha pervertido. Lo más doloroso ha sido su vocabulario. Es tanta su perversión, que ve por justo lo injusto. ¡Que cosa no! A menudo cuando un pobre hombre se hace rico, se convierte en el peor enemigo de la sociedad. Lastimosamente esto lo puede producir solo una conciencia pervertida, máxime cuando se trata de una conciencia que tiene un ilegítimo poder. (Si existe algún parecido con personajes de la vida real, es pura coincidencia) Afectuosamente, Imperfecto.
jueves, 4 de diciembre de 2008
Vesania
Mascioli Garcia
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