Muy poco...casi nada - Para que digan que las buenas noticias no son noticia. El anuncio de la liberación de 15 rehenes que permanecían a manos de las FARC colombianas ha supuesto un alivio en todo el mundo. Sobre todo desde que Nicolas Sarkozy se involucró, hemos vivido casi como propio el secuestro de Ingrid Betancourt. No hace falta ser mentalista para imaginarse en la piel de su familia cayendo en el nihilismo en algún momento de esos seis años, no creyendo en nada, imaginándose en la piel de su Ingrid marchitándose. .. muriendo. Para quien quiera emplear parte del verano en una lectura muy poco veraniega, ahí queda 'Muy poco... casi nada', del filósofo británico afincado en Estados Unidos, Simon Critchley. Tipo raro, como él solo, su segundo libro (1997), revisado en 2004, versó sobre el problema del nihilismo, centrando su diagnóstico en la carencia de creencias religiosas como punto de partida. El nihilista podría pensar que un 'click' es muy poco... casi nada. Pero ese pequeño sonido puede recoger un momento sublime. Frente a otros medios o lenguajes, ese es el gran valor de la fotografía: conseguir elevar a categoría una pequeña fracción de segundo. Sobre todo, cuando existe una abrumadora cantidad de material gráfico y literario. Es entonces, cuando de repente, un instante mágico, único e irrepetible.
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